El «pharming», neologismo basado en las palabras «farming» (cultivo) y «phishing» (suplantación de identidad), es una técnica muy retorcida que sustituye, sin el conocimiento de la víctima, la dirección de un sitio web legítimo y la redirige a un sitio malicioso. Esto puede ocurrir sin que el usuario se dé cuenta en absoluto de que se le ha desviado a un sitio web falso, ya que parece completamente idéntico al legítimo.
En efecto, un pirata informático puede, utilizando un programa malicioso o un troyano instalado previamente en el dispositivo, redirigir al usuario a un sitio web malicioso, aunque éste haya escrito el nombre correcto en la barra de direcciones del navegador. Esta técnica es muy utilizada por los ciberdelincuentes para obtener información sensible, como datos bancarios o credenciales de acceso, así como para propagar malware.
En esta infografía encontrarás información útil para reconocerlo y evitarlo.